sabor excelente
La cebolla amarilla holandesa tiene un sabor intenso, muy distintivo. La cebolla roja tiene un aroma algo suave y un magnífico color rojo que llega hasta el centro, lo que la hace ideal, por ejemplo, para ensaladas. La cebolla holandesa tiene un alto contenido de materia seca, de alrededor del 11%. Ello garantiza su tan apreciado carácter crujiente y su alto contenido de fibras.
La elección correcta de las variedades y la pericia del cultivador holandés también ayudan a proporcionar un producto saludable y sabroso.
La cebolla holandesa es rica en vitamina C, fósforo, calcio, sodio y potasio, así como también en antioxidantes importantes, tales como la quercetina, y el selenio. Las fibras naturales de las cebollas holandesas son esenciales para una flora intestinal saludable y una digestión óptima. Las empresas holandesas de mejora de semillas están constantemente desarrollando nuevas variedades con aspectos específicos de sabor que puedan satisfacer los requisitos demandados, en cualquier parte del mundo.
